A mediados de octubre el Ayuntamiento de Madrid hizo público su informe del Estado de la Movilidad para 2012, como ya han contado otros compañeros. Destacamos algún detalle del extenso documento.
En 2012 el aforo de bicicletas -esta vez medido en hora punta, nada de encuestas ni estimaciones- ha subido un 27% en la almendra central de Madrid, y viene subiendo desde 2008. Repetimos: esto es medición directa, cifras de verdad. ¡Buena noticia! Es una pena que el Ayto. no haya calculado el reparto modal de la bici, no obstante, pero bueno, no dejan de ser datos «duros».
Si recordamos que en Barcelona o Sevilla también se ha constatado un ascenso constante del uso de la bicicleta en sus respectivos informes, quizá esto ayude a poner en contexto el ascenso de las consecuencias de la siniestralidad ciclista en España: es posible que guarde relación con el ascenso en su uso. Bueno, o quizá no: al fin y al cabo, por desgracia, la mayoría de fallecidos y heridos graves siguen produciéndose fuera de ciudad. En fin. Al grano.
No todo es tan bueno. Se ha repetido muchas veces que Madrid seguramente no sea la ciudad española más cómoda para moverse en bicicleta. Así parecen creerlo los madrileños: la bici es el modo de transporte peor valorado desde 2009, aunque su valoración no fluctúa demasiado. ¿Qué podría hacer el Ayuntamiento para mejorar esta percepción?
Y por último, en cuanto a la siniestralidad, el Ayuntamiento ha liberado solo una tarta sin demasiada explicación ni cifras absolutas, pero que a primera vista parece coherente con el análisis que realizamos sobre uso declarado al CIS: la «peligrosidad» de las motos parece muy alta en cuanto a víctimas graves frente al uso que tienen. Muy notoria resulta también la enorme proporción de peatones graves: el 36%. Si tuviéramos datos de reparto modal, podríamos aventurar si estos porcentajes son altos o bajos, más allá del ojímetro.
Así que muchas gracias al Ayuntamiento por publicar el informe, y a los ciudadanos de Madrid que apuestan por la bici 😉